Tres vinos de la bodega Casar de Burbia participan en el Salón de los Mejores Vinos de España.

A finales de esta semana tendrá lugar en la capital la XIII edición de El Salón de los Mejores Vinos de España. Cerca de 140 bodegas, procedentes de 43 zonas de producción de toda España, presentarán más de 330 referencias, todas ellas con una puntuación igual o superior a 93 puntos. Para la ocasión las bodegas visten a sus caldos de gala. Así lo hará la bodega berciana Casar de Burbia con sus vinos seleccionados: ‘Tebaida Nemesio 2009’, junto a los clásicos, ‘Hombros 2009’ y ‘Tebaida 2010’.

Esta bodega familiar, ubicada en Carracedelo, pone alma y corazón en todo lo que hace. Más de dos décadas dedicada al cuidado y mimo de sus viñas bajo su lema, ‘Bierzo en esencia’, que le han hecho merecedora de numerosos reconocimientos internacionales y repetir presencia por tercer año consecutivo en El Salón de los Mejores Vinos de España.

Como novedad, este año se estrena en el Salón su vino Tebaida Nemesio. Un tinto de alta gama, con el que la bodega rinde homenaje a su fundador, Nemesio Fernández Bruña. Presentada su primer añada, 2009, ante la prensa y medios especializados el pasado mes de abril ya está disponible en el mercado. Un vino de pago del que podrán disfrutar en primicia profesionales y el público visitante, que se sale un poco de la línea mineral que caracteriza a la bodega, y en el que se aprecian aromas y sabores en armonía de romero, tomillo y flores sobre un fondo de fruta.

Con una apuesta clara por la elaboración de vinos de calidad a partir de la variedad reina de la zona, la Mencía, los vinos de Casar de Burbia se caracterizan por una recogida y elaboración artesanal basada en técnicas tradicionales de la enología francesa, que dan lugar a una explosión de aromas y sabores que son pura expresión de fruta y reflejo del peculiar Terroir arcilloso y mineral del que proceden.

Casar de Burbia

Esta bodega familiar lleva más de dos décadas dedicada al cuidado de sus viñas bajo su lema: ‘Bierzo en esencia’. Viñas donde el patriarca de la familia, Nemesio Fernández Bruña, supo poner en valor una forma de entender la viticultura en El Bierzo: desde el respeto al territorio, el entorno y una manera de concebir el proceso del vino sin prisa pero sin pausa.